Y puedes vivirlo en Can Lluc Boutique Country Hotel & Villas.
Ubicado en un entorno idílico con filtro 100% mediterráneo, existe un rincón en Ibiza que presume además de estar abierto todo el año.
Can Lluc Boutique Country Hotel & Villas, con sus más de 2.000 parras y rodeado de pinos, higueras, algarrobos y olivos milenarios, ofrece el ambiente ideal para cerrar un día de desconexión en la isla blanca.
Su piscina, calificada como una de las 10 mejores del mundo por el portal Rusticae, envuelve el atardecer en Can Lluc en un momento mágico. Un ambiente perfecto para saborear un cóctel con personalidad propia elaborado con frutos del huerto situado en la misma finca.
Un paraíso, infinitos atardeceres con filosofía Ibiza
Cuando Lucas Prats y Tina Soriano abrieron Can Lluc hace 15 años, sabían que este oasis exclusivo a solo 10 minutos del centro de Ibiza respiraba por sí mismo una atmósfera muy especial. Los impulsores de esta casa payesa convertida en hotel boutique aunaron el arraigo a la isla y los guiños a las nuevas tendencias decorativas bajo un mismo filtro.
Un saber hacer que cobró forma en un inmenso jardín que invita a la naturaleza a adentrarse en la antigua casa familiar, propiedad del abuelo de Lucas Prats, y a convivir con los algarrobos, los olivos, los pinos, las higueras y la enorme parra que caracteriza a este hotel con encanto.
Un ambiente de auténtico oasis donde la exquisita decoración interior y exterior supone la guinda para vivir un atardecer de ensueño. Las camas balinesas que rodean su famosa piscina invitan a dejarse llevar por la brisa mediterránea mientras el sol va cayendo sobre Can Lluc.
Un descanso de lujo en el mejor ambiente, donde poder elegir entre los diferentes cócteles a degustar, en los que el producto kilómetro 0 es el auténtico protagonista. Productos de temporada y diferentes frutas tropicales se mezclan en una explosión de sabores en auténticas elaboraciones completamente naturales. Una variada carta con la que acompañar el atardecer que también se compone de zumos détox a elegir entre multitud de ingredientes: remolacha, manzana, apio, calabacín, jengibre.. son solo algunas de las opciones.
Todo en un entorno de piedra y madera integradas de forma natural con los detalles minimalistas que Tina y Lucas han sabido dotar a Can Lluc. El mimo en el trato convierte las puestas de sol en una auténtica desconexión haciéndole sentir a cada visitante como si estuviera en su propio hogar.
Garden & Sunset, una sala idónea que enmarca cada atardecer
Pensada para albergar los eventos personales y profesionales más exclusivos, esta es una sala que responde a las demandas de los clientes más fieles a Can Lluc. Con paredes acristaladas y un carácter de auténtica privacidad dentro de este agroturismo, Garden & Sunset es la opción idónea para quienes quieren disfrutar de la puesta de sol en cualquier época del año.
Todo un ejemplo de cómo los clientes son una inspiración constante a la hora de adaptar este reconocido hotel con encanto a los nuevos tiempos.
Parejas, familias, amigos así como diferentes periodistas e instagramers/nfluencers ya han vivido en primera persona qué significa un atardecer marca Can Lluc. Solo dos kilómetros separan a este agroturismo de San Rafael, centro geográfico de la isla y apenas 10 de San Antonio.
Una casa con alma ibicenca donde la desconexión y el mejor ambiente son el broche de oro para brindar por el día que cierra.