Imagina despertar en una finca histórica de 300 años, rodeados únicamente por el canto de los pájaros y la brisa mediterránea. Can Lluc no es simplemente un hotel rural de lujo en Ibiza, es el refugio romántico donde vuestra historia de amor comienza de la manera más auténtica posible.
Con solo 25 habitaciones distribuidas en una propiedad inmensa, garantizamos la intimidad que vuestra luna de miel merece, lejos del bullicio turístico pero con todas las comodidades que soñáis para este momento tan especial
Por qué elegir Can Lluc como el hotel para tu luna de miel
Un lugar donde realmente podéis estar solos
La diferencia se nota desde el momento en que cruzáis la puerta principal. No hay lobby lleno de gente haciendo cola para hacer el check-in, no hay niños corriendo por los pasillos, no hay esa sensación agobiante de estar en un sitio masificado donde todo el mundo busca lo mismo que vosotros.
Con 25 habitaciones repartidas por hectáreas de terreno, la intimidad está garantizada. Hay rincones en los jardines donde podéis pasar horas sin que nadie os moleste, bancos de piedra bajo árboles que ya daban sombra cuando vuestros abuelos eran jóvenes, senderos que parecen hechos solo para vosotros dos.
La casa principal conserva cada piedra, cada detalle original de cuando se construyó en el siglo XVIII. No es decoración de atrezzo pensada para turistas, sino patrimonio auténtico que la familia Prats ha cuidado durante tres generaciones. Cuando os alojáis aquí no sois huéspedes anónimos de una cadena hotelera, sino invitados especiales en una casa familiar que tiene historias que contar.

Atención personal que marca la diferencia
En los hoteles grandes los empleados cambian cada temporada y nunca saben quién eres. Aquí las mismas personas que os reciben el primer día os despiden cuando os vais, y eso crea algo especial. Recuerdan vuestros nombres, se acuerdan de que preferís el café más cargado o que os gusta madrugar para ver amanecer.
Si comentáis que buscáis un sitio especial para cenar solos, no os dan una lista impersonal sacada de internet. Os organizan algo pensado específicamente para vosotros, porque conocen la isla como la palma de su mano y saben exactamente qué funciona para cada tipo de pareja.
Llevamos aquí suficiente tiempo como para saber que cada luna de miel es diferente. Hay parejas que quieren desconectar por completo del mundo, otras que prefieren alternar relax con aventura, algunas que buscan experiencias gastronómicas auténticas. La ventaja de un sitio familiar como Can Lluc es que se adaptan a lo que necesitáis, no al revés.


Experiencias que solo viviréis aquí
Despertares que no se olvidan
Las habitaciones en Can Lluc tienen algo especial. Quizás sean los muros de piedra que han visto pasar siglos de historias, o las vigas de madera originales, o simplemente esa luz mediterránea que entra por ventanas que conservan el encanto de otra época. El caso es que despertarse aquí es diferente.
El silencio es real. No es como en las ciudades donde crees que hay silencio pero en realidad hay un ruido de fondo constante. Aquí solo se escucha el viento entre los olivos y algún pájaro que ha decidido ser vuestra alarma natural. Cada habitación tiene terraza privada donde tomar el café de la mañana viendo campos que conservan el paisaje ibicenco original, no el construido para postales turísticas.

Comida pensada para vosotros
Los desayunos en Can Lluc no salen de una cocina industrial donde preparan 200 iguales. Se hacen cada mañana pensando en vosotros, con productos de la huerta propia o de productores locales a los que conocen desde hace décadas.
Los tomates saben a tomate de verdad (esos que cuando los pruebas te das cuenta de lo que te habías estado perdiendo), el aceite viene de olivos que ya daban aceitunas cuando vuestros bisabuelos eran jóvenes, el queso de cabra lo hace una familia vecina que mantiene las recetas de siempre.
Cuando queráis celebrar una cena especial, no será en un restaurante del hotel con 50 mesas más ocupadas por otros huéspedes. El chef prepara una mesa solo para vosotros en algún rincón mágico del jardín, con velas que se reflejan en el estanque y un menú que ha pensado específicamente para vuestra velada.


Relax en pareja como no lo habéis vivido nunca
Los masajes en Can Lluc se hacen al aire libre, en una zona del jardín donde estáis rodeados de naturaleza mediterránea auténtica. Usan aceites elaborados con plantas que crecen aquí mismo: lavanda, romero, tomillo que ha absorbido el mismo sol que os está calentando mientras os relajáis.
No hay paredes artificiales ni música enlatada. El sonido de fondo viene de los pájaros que anidan en los árboles centenarios y la brisa que mueve las hojas. Es wellness integrado en el paisaje que ha permanecido igual durante siglos.


Ubicación perfecta para descubrir Ibiza en pareja
Estar en Sant Rafael significa vivir en la Ibiza auténtica, esa que conserva el encanto de siempre. Pero también tenéis a pocos minutos las mejores calas de la isla. En 15 minutos llegáis a Cala Comte con esas aguas imposiblemente azules, perfectas para baños matutinos en soledad.
Lo que realmente marca la diferencia es que desde Can Lluc no solo tenéis proximidad a los sitios bonitos, sino acceso a experiencias que no están al alcance del turismo normal. Tres generaciones viviendo aquí han creado conexiones únicas: pescadores que os llevan a calas inaccesibles por tierra, artistas que abren sus talleres solo para huéspedes especiales, productores que mantienen variedades que están desapareciendo del resto de la isla.
La diferencia de lo familiar y auténtico
La familia Prats lleva tres generaciones recibiendo parejas en Can Lluc. Han visto miles de historias de amor comenzar entre estos muros, y saben exactamente qué necesita cada pareja para que su luna de miel sea perfecta.
No aplican protocolos aprendidos en manuales de hostelería. Cada atención surge del conocimiento acumulado de lo que realmente funciona para crear momentos especiales. Cuando os sugieren el momento perfecto para visitar una cala o el restaurante ideal para vuestra cena romántica, lo hacen desde la experiencia de haberlo visto funcionar miles de veces.


Vuestra luna de miel perfecta os está esperando
Con más de 30 años recibiendo parejas en su momento más especial, podemos decir que Can Lluc no es simplemente un alojamiento para vuestros días en Ibiza. Es el refugio donde vuestra nueva vida juntos va a empezar de la manera más bonita posible.